Falta de transparencia del Gobierno catalán respecto a la posible indemnización si no se hiciera el proyecto Hard Rock

| 12 de febrero de 2025

El informe jurídico que ha generado controversia en el ámbito político catalán revela información crucial sobre las implicaciones económicas del megacasino del Hard Rock en Tarragona. A pesar de la insistencia del Gobierno catalán en que ha actuado con transparencia, la decisión de no incluir el anexo que detalla las posibles indemnizaciones ha llevado a acusaciones de ocultación de información por parte de los grupos parlamentarios de la CUP y del PP.

Según el documento, si el Gobierno decidiera revocar la autorización del proyecto tras aprobar el Plan Director Urbanístico (PDU), podría enfrentarse a una reclamación por daños emergentes, que se estima en unos 21,4 millones de euros, además de una indemnización global que podría oscilar entre 37,5 y 50 millones de euros. Estas cifras son significativas y destacan la carga financiera que podría suponer para la Generalitat si el proyecto no avanza.

La CUP ha argumentado que el Gobierno podría detener el proyecto sin consecuencias económicas, lo que contradice las estimaciones del informe. Las tensiones entre los partidos se intensifican, ya que el PSC, que anteriormente apoyaba el proyecto, ahora adopta una postura más ambigua, mientras que ERC y los comunes buscan desmarcarse de las bonificaciones fiscales que habían favorecido al proyecto en el pasado.

El informe también menciona que para que el promotor pueda reclamar una indemnización, tendría que demostrar que la administración no actuó conforme a la legalidad. Esto añade otra capa de complejidad a la situación, ya que cualquier decisión del Gobierno sobre el futuro del megacasino tendrá que ser cuidadosamente considerada para evitar posibles reclamaciones económicas.

En conclusión, el futuro del megacasino del Hard Rock en Tarragona está envuelto en un contexto de incertidumbre política y económica, con importantes implicaciones para la Generalitat y sus relaciones con los diferentes grupos parlamentarios. La gestión de este proyecto se ha convertido en un tema candente que refleja las tensiones y negociaciones en curso en el Govern catalán.